sexta-feira, junho 19, 2009

Imposible atravesar la vida...

Sin que un trabajo salga mal hecho,
Sin que una amistad cause decepción,
Sin padecer algún quebranto de salud,
Sin que un amor nos abandone,
Sin que nadie de la familia fallezca,
Sin equivocarse en un negocio.
Ese es el costo de vivir.
Sin embargo lo importante no es lo que suceda, sino, como se relaciona.
Si te pones a coleccionar heridas eternamente sangrantes,
vivirás como un pájaro herido incapaz de volver a volar.
Uno crece...
Uno crece cuando no hay vacío de esperanza,
ni debilitamiento de voluntad, ni pérdida de fe.
Uno crece cuando acepta la realidad y tiene aplomo de vivirla.
Cuando acepta su destino, pero tiene la voluntad de trabajar para cambiarlo.
Uno crece asimilando lo que deja por detrás,
construyendo lo que tiene por delante y proyectando lo que puede
ser el porvenir.
Crece cuando supera, se valora y sabe dar frutos.
Uno crece cuando abre caminos dejando huellas, asimila experiencias...
¡Y siembra raíces!
Uno crece cuando se impone metas, sin importarles comentarios negativos ni prejuicios,
cuando da ejemplos sin importarle burlas, ni desdenes, cuando cumple
con su labor.
Uno crece cuando se es fuerte por carácter, sostenido por formación,
sensible por temperamento...
¡Y humano por nacimiento!
Uno crece cuando enfrenta el invierno aunque pierda las hojas.
Uno crece ayudando a sus semejantes,
conociéndose a sí mismo y dándole a la vida más de lo que recibe.
Uno crece cuando se planta para no retroceder...
Cuando se defiende como águila para no dejar de volar...
Cuando se clava como ancla y se ilumina como estrella.
Entonces...Uno Crece.

[autor desconhecido]

Um comentário: